Presentación

Las otras voces de Israel y Palestina Este blog nace de un proyecto entre y -dentro de Las otras voces de Israel y Palestina - con el fin de visibilizar el trabajo de organizaciones israelíes y palestinas para rematar el conflicto y conseguir igualdad de derechos. Explicar sólo estas iniciativas dejaría a alguien ajeno a la situación de Gaza y Cisjordania sin comprender el escenario. Por ello, esta bitácora incluye también historias personales de ambos lados con el fin de que el conocimiento entre todos mantenga fuerte el diálogo.

domingo, 14 de agosto de 2011

Festiclown. Crónica 7: Cangrejo II


Iván Prado. Imagen: Festiclown Palestina.



Iván Prado/Palestina

Terraza del hostal evangelista, cañerías a modo de laberinto, cuerdas de tendales y otros obstáculos, no se ve casi nada, hace viento y la noche se ha vuelto húmeda y fría. Junto a un muro se reúnen al salir la luna los “yenin boys”, entre canciones del móvil y cervezas clandestinas se van desgranando historias y sueños.

Llegamos cerca de la medianoche y todavía hay ganas de compartir, siempre hay ganas de compartir, el tema esta vez es su propia ciudad, Yenín, quizás la ciudad más castigada durante la Segunda Intifada donde el poder de Israel ha dejado su huella en cada una de sus piedras.

A. comienza su historia como quien habla de unas vacaciones en la montaña. Ha pasado por la cárcel pero su sonrisa veinteañera no puede esconder su vulnerabilidad. Nos cuenta que cuando era pequeño, él y sus amigos de Yenín sólo tenían una diversión, tirar piedras a los militares israelitas, apunta que a veces alguno de la pandilla moría, pero que estaban tan habituados que a la semana siguiente volvían a enfrentarse a los tanques.

Sigue contándonos que cuando el ejercitó sitió la ciudad durante nueve días y nueve noches, descargando misiles y fuego de artillería, su padre lo “escogió” entre todos sus hijos para que junto al hijo de la otra familia con la que se escondían fueran a buscar víveres por las calles, volvieron vivos sí pero con pocos alimentos (su cara se ensombrece al recordarlo).

N. Continúa el relato, a su manera, con un aire teatral, su primera frase es -te voy a contar una historia- explica como fueron esos nueve días -primero bombardearon el campo de refugiados, después entraron con bulldozers y, cuando ya no quedaba ningún edifico en pié, entraron los soldados, para certificar que habían barrido todo esa pequeña ciudad dentro de otra-. Pero… dice N. -Eso no fue lo peor-.

Y sigue -las calles olían a muerte y desesperación, los cuerpos se esparcían entre los escombros…pero eso, Iván, no fue lo peor, el primer día toda la gente estaba encerrada en su casa sin moverse un milímetro de su sitio porque ante cualquier movimiento los francotiradores disparaban a matar- pero apuntilla – Y eso no fue lo peor, tampoco fue lo peor que durante semanas no tuviéramos agua porque los israelitas echaban los cadáveres en el embalse, que durante los siguientes meses el ejército siguiera entrando en la ciudad ordenando el toque de queda durante días, y que sólo pudiésemos salir dos horas a la calle- hace una pausa y repite -tampoco fue lo peor que impidieran entrar a las ambulancias, que no dejaran enterrar a los muertos, pero eso, Iván, no fue lo peor, tampoco lo fue la construcción del Muro, ni perder nuestras tierras ni siquiera que una generación se quedara sin ir a la escuela.

Lo peor, (y aquí se hace un silencio total), que nos ha pasado es que todo esto lo podemos contar sin llorar, así tan tranquilamente, porque lo que perdimos en aquel ataque no fueron las tierras, ni los muertos, ni las casas, perdimos la capacidad de sentir, de amar, de emocionarnos-.

Cuando N. acaba nadie habla, pasan unos segundos y le miro a los ojos, casi sin voz y con la que me queda bien ronca (después de los entrenamientos de estos días) le digo que: – alguien que ama el circo como lo amáis vosotros, que os esforzáis tanto por entrenar y aprender, que sois capaces de hacer un show como el de esta noche en Nil´in , que os entregáis en cuerpo y alma para que los niños palestinos puedan ver por 1ª vez en su vida un show de circo, no podéis haber perdido la capacidad de sentir y amar.

Me emociono y le digo -Mira N. cuando yo volví por segunda vez a Palestina recuperé la capacidad de confiar en la humanidad, porque descubrí en el pueblo palestino una confianza inagotable en el futuro, más allá del exterminio que impone Israel, la existencia del circo palestino, la existencia de gente tan bella y tan noble como vosotros hace que el circo y la cultura sean un lugar, todavía hoy, en el que poder construir nuestros sueños… por eso amo este país-.

Iván prado, Ramala séptimo día de Ramadán – Corrección a cargo de Miluka Surinach -

sábado, 23 de julio de 2011

El mayor check point del mundo

El Festival Internacional de Clown de Galicia (Festiclown) y la Asociación cultural y de cooperación internacional Pallasos en Rebeldía son los dos organismos responsables del Festiclown Palestina, una iniciativa que pretende aportar oxígeno a los palestinos que sufren las secuelas físicas y psicológicas del interminable conflicto árabe-israelí.  El trabajo se puede seguir en la web de Pallasos en Rebeldía. En este blog hay más información disponible. 

Algunos periódicos recogieron esta semana un texto escrito por Iván Prado, un clown gallego implicado en este proyecto. Aborda las medidas de seguridad a las que la expedición del Festiclown Palestina tuvo que hacer frente en el aeropuerto de Ben Gurion (Tel-Aviv). 

Iván Prado en el Territorio Palestino.






CRONICA CERO: EL MAYOR CHEK POINT DEL MUNDO
Avión, madrugada, cafés y bocadillos que solo saben a risas nerviosas y abrazos cómplices, es el mismo viaje que hace dos años, que hace un año, que hoy….Prisas y miedos, horas de sueño robadas por la excitación y el trabajo,  emociones de la  despedida y sueños por cumplirse. Madrid-tel aviv-Jerusalem y entre medias el mayor chek point de la historia: Ben Gurion.
Un chek point disfrazado de aeropuerto:
Pasillos que se vuelven interminables, que amenazan con su luz de hospital y sus cámaras móviles, pasillos que para mi solo tienen un destino: la garita de interrogatorios de la policía de fronteras isarelí; el sin bet. Todo en este aeropuerto está calculado y previsto con la misma precisión enferma que el muro de la vergüenza, que ahoga Cisjordania en mitades q no se tocan. Agua que cae del cielo para recordar que Israel se ha apropiado de los pozos de esta parte casi desértica del mundo, militares disfrazados de paisano para esconder que son la 1º potencia mundial en inteligencia y espionaje, y metros y metros de pasillos para empequeñecerte con cada paso si sabes que no eres bienvenido a la tierra prometida. Una vez más sucede.  Un funcionario, yo le llamo el taxista,  decide llevarse mi pasaporte de paseo y a mi detrás como un perrito faldero hasta la ya familiar sala de espera en la que empieza un ir y venir de gente que, más que personas, son tratadas como virus: Israel no quiere ser contaminada por los derechos humanos ni el libre tránsito de la gente y su historia. Pero después de 16 meses y un estúpido interrogatorio consigo entrar en Palestina, parece que la celda y la deportación no son mi destino en este viaje, por lo menos de momento… Ben Gurion, como bien lo saben los solidarios internacionales (especialmente en estos días)y el pueblo palestino señaladamente, es un chek point que retiene, expulsa, encarcela e humilla a toda la humanidad, pero hoy como un cíclope dormido ha dejado que se le cuelen dos payasos rebeldes con la humilde llama de un festival lleno de dignidad y esperanza: EL FESTICLOWN PALESTINA EMPIEZA SU CUENTA ATRÁS, y mi sueño de volver al corazón de la humanidad se ha cumplido. Estoy de nuevo en casa… 

lunes, 20 de junio de 2011

Reverso: Palestina errante



L. Pérez/Pontevedra

Hoy he publicado en mi muro de facebook el dolor que me provoca que en el mundo haya más de 40 millones de refugiados, hombres y mujeres que tuvieron que huir de sus países por las guerras (¿qué es un conflicto armado sino una guerra?) o por la violación de sus derechos. Hoy facebook se me queda corto. Acostumbramos a hablar de grupos de personas como si no tuviesen alma; decimos “millones de muertos”, “millones de refugiados”, “miles y miles de parados” o “cientos de damnificados”. Tal vez ni siquiera podemos imaginarnos la tragedia de un refugiado, pero debemos tratar de pensarnos desde fuera, vernos caminando por una pista de tierra con la nada por delante y con nuestra vida detrás, obligados a partir de cero por intereses ajenos difíciles de comprender.

Según los cómputos de la Agencia de la ONU para el Socorro a los Refugiados Palestinos en Oriente Medio (UNRWA), los palestinos son una tercera parte del total de la población mundial que se ve forzada a buscar cobijo lejos de su casa. En los territorios ocupados, Líbano, Siria y Jordania, la cifra es de 4,8 millones, es decir, más del 43 por ciento del total de palestinos que vive en todo el mundo. ¿Cuántas almas son? Pues más o menos el número de parados que hay en nuestro país. De unos hablamos constantemente: son y deben ser nuestra preocupación; de los otros nos acordamos muy de vez en cuando, tal vez en días como hoy, coincidiendo con el Día Mundial del Refugiado.

Ashraf Khader, delante del Muro de la Vergüenza, en Ramallah.
Foto: Pelu Vidal
Conocí a Ashraf Khader, si no me equivoco, el 18 de octubre de 2010. Fue el guía que tuvimos los reporteros que Agareso envió a Oriente Medio en el marco de “Caminos de Paz. Las otras voces de Israel y Palestina”. Ashraf jugó un papel muy importante en nuestro proyecto, en este blog, en nuestros documentales. Desmenuzó en dos jornadas la reflexión más interesante: la historia de su vida y la de su familia, una familia de refugiados.

Sus allegados viven en Jordania y en Egipto. Sólo Ashraf y su padre tuvieron la oportunidad de regresar a los Territorios Palestinos. Decidió volver, pero lo hizo en soledad. Su padre prefirió no regresar y continúa en el exilio porque, alto y claro, eso es el exilio. Los parientes de Ashraf no viven en campos de refugiados, tienen vivienda propia en Jordania y Egipto, pero… “Para un refugiado, lo más complicado es la situación en la que vive. El segundo problema es que, en el país de destino, no tiene derechos”. Los palestinos que se marchan tienen enormes dificultades para conseguir un trabajo y mantener a sus familias, porque “no son tratados como ciudadanos de esos países”. Creo que Ashraf quiso decir que “no son tratados como ciudadanos”, son una suerte de apátridas.



“La mayoría de los países tratan de convencer a los refugiados de que se comporta así por el propio bien de Palestina. No quieren que se sientan como en casa porque dicen que olvidarán su país, así que no les dan derechos”, nos contó. Ashraf regresó a una patria extraña que no llega a ser patria y participó activamente en la II Intifada o Intifada de Al-Aqsa. Después decidió dejar atrás la violencia y pasó a formar parte de Combatants for Peace, un movimiento pacífico del que forman parte ex soldados israelíes y palestinos que lucharon en la II Intifada. Fue una decisión importante, tan potente que cambió su vida. Pero, ¿cómo explicarla a su familia, que se vio obligada a marcharse de los Territorios Palestinos por el desacuerdo entre árabes e israelíes? ¿Cómo decirles que trabaja con hebreos? Por su respuesta sabemos que no llegaron a entenderla: “Si viniesen aquí creerían en lo que hago. Pero no pueden volver”.
En Egipto, Jordania, Siria, en los territorios ocupados… En todo el mundo hay familias como la de Ashraf. Son más que números. Por más que nos lo cuenten, no podemos ni imaginarnos su dolor. Pero sí es nuestra obligación tratar de pensarnos desde fuera, vernos caminando por una pista de tierra con la nada por delante y con toda nuestra vida detrás.

domingo, 5 de junio de 2011

Reverso: medio año después

L. Pérez/Pontevedra

Formo parte del equipo de cuatro personas que se desplazo a los Territorios Palestinos en el marco del proyecto Camiños de Paz, una iniciativa que nos ha permitido y que nos permitirá dar a conocer un trabajo prácticamente desconocido. De Palestina e Israel recibimos en España, casi únicamente, noticias sobre la falta de entendimiento entre los políticos. Soy periodista y me duele decirlo, pero los medios de comunicación han dejado a un lado las historias humanas y el esfuerzo de ciudadanos anónimos que sí sueñan con la paz.
En Palestina e Israel escuché algunas de las historias más tristes que he oído en mi vida, no sólo como periodista. Pero también conocí esa labor oculta que implica a cientos de personas. Contactamos con organizaciones con prestigio internacional, como Cruz Roja, hasta grupos más pequeños de mujeres y de hombres que han hecho de la búsqueda de una solución al conflicto el eje de sus vidas. Muchos de ellos fueron testigos directos de los enfrentamientos y se sumaron a movimientos de paz. The Parents Circle, por ejemplo, es una ONG que agrupa a ciudadanos palestinos e israelíes que perdieron a sus familiares a manos del ejército israelí o en acciones protagonizadas por árabes suicidas. Rami Elhanan, por ejemplo, perdió a su hija de 14 años cuando un palestino hizo explotar una bomba. El hermano de Ali Abu Awwad fue asesinado por un soldado israelí. Ninguno de los dos tenía demasiadas ganas de vivir, pero encontraron en The Parents Circle un lugar de entendimiento.
En Jerusalén hay una radio que emite en dos idiomas para acercar a los dos pueblos, y una ONG integrada por mujeres que vigilan el trato que los soldados israelíes dan a los palestinos cuando cruzan los puntos de control; También el comité contra la destrucción de casas palestinas, que visibiliza la demolición de casas de los ciudadanos árabes por parte del gobierno judío. Y es un movimiento que está encabezado por judíos.
Llegará un momento en el que el Gobierno de Israel y la Autoridad Nacional Palestina tendrán que escuchar al tejido social. Esperemos que sea más pronto que tarde.

viernes, 3 de junio de 2011

Las distintas vertientes de la ocupación palestina a través del cine


Agareso

Las ONGD Asamblea de Cooperación por la Paz (ACPP) y Asociación Gallega de Reporteirows Solidarios (AGARESO) dan comienzo este lunes 6 de junio a un ciclo de cine sobre la ocupación palestina en el Salón de Grados de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la USC con la proyección del documental 'Al otro lado' y la terminan el viernes 10 con una charla del activista palestino Sami Dawood en casa das Campás de Pontevedra.
Este ciclo de cine se enmarca en la campaña de sensibilización 'Caminos de Paz: Las Outras Voces de Israel y Palestina', que tiene como objetivo acercar a la ciudadanía gallega, desde la perspectiva de los derechos humanos y del cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), la situación en Oriente Próximo y el trabajo realizado por ACPP, AGARESO y la sociedad civil Palestino-israelí con el fin de lograr una solución pacífica del conflicto de esta zona.
Durante los días 6, 7 y 8 se proyectarán diferentes documentales que muestran las condiciones en las que viven los pueblos palestino e israelí tras la situación de conflicto, la violación de derechos humanos, el papel de las organizaciones paficistas, de la sociedad civil y de la comunidad internacional. Todas las proyecciones serán a las 19.00 horas en Ciencias Políticas e irán seguidas de un debate acerca de la realidad mostrada por cada film.
Para complementar esta actividad, los días 9 y 10 está organizada una charla de Sami Dawood, director técnico de Palestinian Hidrology Group (PHG), ONG Palestina que trabaja para mejorar el acceso a los servicios de agua y saneamiento, y para controlar contaminación y el cambio climático en el territorio palestino ocupado.

Los documentales que forman parte de este ciclo son:
Lunes 6 de junio: "Al otro lado" (Julio Azcárate), con una duración de 58 minutos. Recoge como en el mes de septiembre de 2005 un grupo de juristas realiza un viaje la Palestina con el objetivo de comprobar sobre el terreno las consecuencias que había tenido la Opinión Consultiva de la Corte Internacional de justicia de 9 de julio de 2004 por la que declaraba contrario al derecho Internacional el Muro que el Estado de Israel está construyendo en el territorio palestino ocupado. En concreto, se trataba de observar el estado actual de la construcción del Muro, la politica israelí respecto de eso y la situación real de la población palestina afectada.

Martes 7 de junio: Dos proyecciones:
"Palestina: El agua ocupada" (Asamblea de Cooperación por la Paz). Un documental de 21 minutos acerca del Theatre for Everybody, un grupo de teatro palestino que, con su obra "Maye, maye" (Agua, agua), trata de sensibilizar a la población de Gaza acerca de la importancia de un buen uso y ahorro del agua. Pero esta importancia no se debe únicamente a la escasez o al cambio climático. Gaza está bajo asedio y la vida, a veces, se convierte en supervivencia.
"Resisting the occupation" (ICAHD: Comité Israelí contra la Demolición de Casas). Un documental de 24 minutos sobre la tarea de la organización ICAHD, realizado por los mismos, que muestra su resistencia pacifica a las demoliciones de casas palestinas en los territorios ocupados.

Miércoles 8 de junio: "Promises" (Justine Shapiro y B. Goldberg). Película de 106 minutos en la que a partir de los testimonios de siete niños (de 9 a 13 años), conoceremos lo complicado que es crecer en Jerusalén. Aunque los niños viven a sólo veinte minutos de distancia entre sí, habitan en mundos radicalmente diferentes, prácticamente incomunicados, y son conscientes de la situación. Su visión de las cosas está modelada por las imposiciones de los adultos que les rodean. Pero este grupo decidió saltar las barreras para encontrarse con sus vecinos.

sábado, 21 de mayo de 2011

'Rumbo a Gaza' ayudará a la Franja desafiando la presión internacional

Barco que integrará la II Flotilla de la Libertad. Foto: Rumbo a Gaza


Agareso

Todas las personas que componen Rumbo a Gaza manifiestan su inquebrantable voluntad de zarpar en la tercera semana de junio en la Segunda Flotilla de la Libertad, que partirá con el objetivo de romper y poner fin al bloqueo de la Franja de Gaza. La Campaña Rumbo a Gaza aportará un barco, un nutrido grupo de activistas y un cargamento de ayuda humanitaria a la coalición internacional que compone la Segunda Flotilla de la Libertad.

Desde Rumbo a Gaza responden con una declaración pública a las "inadmisibles presiones que el Gobierno de Israel, con su primer ministro, Benjamín Netanyahu a la cabeza, está realizando sobre el Gobierno de España para impedir la salida de nuestro barco y nuestros activistas".

"También pedimos al presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, que no ceda a las maniobras intimidatorios israelíes y manifestamos nuestra más absoluta disponibilidad a reunirnos con él para explicarle los detalles de la Campaña Rumbo a Gaza y de la Segunda Flotilla de la Libertad", indican.

La Campaña Rumbo a Gaza es una iniciativa no violenta amparada por las legislaciones española e internacional. Por tanto, el Gobierno español está obligado a garantizar tanto su seguridad como su libertad y derecho de llegar hasta la Franja de Gaza.

Desde la Campaña Rumbo a Gaza se entiende que los objetivos de la Flotilla son plenamente coincidentes con la postura oficial del Gobierno de España respecto a la defensa de la legalidad internacional y los Derechos Humanos y de condena del bloqueo de la Franja de Gaza por su carácter ilegal de acuerdo al Derecho Internacional. Esta coincidencia en cuanto a los objetivos hace aún más lógica la idoneidad de un apoyo gubernamental a la Campaña.


Finalmente, recuerdan que la Campaña Rumbo a Gaza ya expuso estos requerimientos de apoyo, seguridad y protección al Gobierno español en la reunión mantenida en marzo con el director general de Política Exterior para el Mediterráneo, Magreb y Oriente Próximo, Juan González-Barba Pera.


En este encuentro, se acordó establecer un canal de comunicación directo entre el Ministerio de Asuntos Exteriores y Rumbo a Gaza para analizar y dar respuesta a las eventualidades que puedan surgir en torno a la  Flotilla. "Desde Rumbo a Gaza expresamos nuestra más absoluta disponibilidad para utilizar este canal cuantas veces sea necesario", indican.

Campaña Rumbo a Gaza
La Campaña Rumbo a Gaza surge de la sociedad civil del Estado español con el objetivo de aportar un barco, un nutrido grupo de activistas y un cargamento de ayuda humanitaria a la Segunda Flotilla de la Libertad, además de sensibilizar a la opinión pública sobre la dramática situación de la Franja de Gaza y, por extensión, del pueblo palestino.

La Campaña Rumbo a Gaza se define como una iniciativa no violenta amparada por las legislaciones española e internacional, no adscrita a ningún partido político español, europeo, palestino o internacional y cuyo fin último es coadyuvar a la búsqueda de una solución al sometimiento del pueblo palestino que sea justa y acorde con los Derechos Humanos.

Tras casi un año de intenso trabajo, Rumbo a Gaza ha logrado la meta inicial de aportar un barco, activistas y ayuda humanitaria a la Segunda Flotilla de la Libertad. Este logro demuestra el gran respaldo que la sociedad civil española ha dado a la campaña y equipara Rumbo a Gaza con otros grandes movimientos de solidaridad internacionalista que han tenido lugar en las últimas décadas como la Plataforma del 0,7 o el movimiento No a la Guerra.

lunes, 18 de abril de 2011

Un estudio confirma los traumas que genera el bloqueo de Gaza



ONU
Agareso

Los niños y los maestros de la franja de Gaza están nerviosos, tristes, estresados, temerosos de un ataque, tienen dificultades para concentrarse y su rendimiento educativo es pobre. Según un nuevo informe de UNESCO estas son consecuencias del bloqueo y de las recientes operaciones militares israelíes.

La mayoría de los entrevistados dijeron que no se sentían seguros durante el trayecto entre sus casas y la escuela o en ella y tienen miedo de que se desate otra guerra. Los profesores indicaron que el rendimiento escolar ha bajado.

El bombardeo de Gaza en diciembre de 2008 y enero de 2009 causó la muerte de 250 estudiantes y 15 maestros refugiados en escuelas de la ONU. El informe recomienda, entre otras cosas, un apoyo psicológico integrado en el sistema educativo.