Presentación

Las otras voces de Israel y Palestina Este blog nace de un proyecto entre y -dentro de Las otras voces de Israel y Palestina - con el fin de visibilizar el trabajo de organizaciones israelíes y palestinas para rematar el conflicto y conseguir igualdad de derechos. Explicar sólo estas iniciativas dejaría a alguien ajeno a la situación de Gaza y Cisjordania sin comprender el escenario. Por ello, esta bitácora incluye también historias personales de ambos lados con el fin de que el conocimiento entre todos mantenga fuerte el diálogo.

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martes, 13 de septiembre de 2011

El nuevo reto palestino


L. Pérez-Pontevedra

Conocimos a Mohammed en la ciudad de Hebrón, en una visita en la que recopilamos información para el documental “Palestina sin barreras”, que aborda la discapacidad en los Territorios Palestinos. Mohammed nació con la espina bífida y es parapléjico. Hace años encontró en el baloncesto una vía de escape que funciona a todo gas; el entrenador que trabaja en la cancha por la que Mohammed y sus compañeros se desplazan en silla de ruedas dice que el joven tiene calidad para participar en competiciones internacionales, un objetivo difícil en cualquier lugar del mundo, y más en los Territorios Palestinos.

Mohammed (de camisa blanca) y sus compañeros durante un entrenamiento.
Foto: Pelu Vidal

La Autoridad Nacional Palestina (ANP) pretende dar un paso de gigante este mes para romper con una situación que su tierra arrastra desde hace décadas y que desquicia a su pueblo por la presión que ejerce el Gobierno israelí, por los asentamientos de colonos y, entre otras muchas cuestiones, por el bloqueo de Gaza. Madmud Abás ofrecerá, el día 23 de septiembre, un discurso ante la Organización de Naciones Unidas, pero lo hará tras solicitar al Consejo de Seguridad que los Territorios Palestinos sean considerados, por fin, un estado. Abás es consciente de que no logrará su objetivo, a pesar de que el número de países que apoyan la iniciativa es numeroso. El propio secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, es partidario de la solución de los dos estados. Pero, ya sea justo o injusto, los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad (EE UU, Francia, Inglaterra, China y Rusia) tienen derecho a vetar la propuesta. El voto de cualquiera de estas naciones es suficiente para que la cuestión no prospere. De hecho, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ya ha anunciado –como cabía esperar– que recurrirá al veto si es necesario, en un nuevo guiño de los americanos al gobierno de Netanyahu.

La ANP es consciente de que no conseguirá que los Territorios Palestinos sean reconocidos como un estado; también se convertirá en papel mojado la propuesta de recuperar las fronteras de 1967. ¿Qué se habrá conseguido, entonces? Mucho. ¿Por qué? Porque ha habido países que ya han anunciado que respaldan las aspiraciones soberanas que persigue el gobierno de Madmud Abás. En principio, el posicionamiento de la Asamblea General será aplastante. España, por ejemplo, considera legítimo que los Territorios Palestinos presenten su demanda y aunque el Gobierno no ha desvelado todavía su posicionamiento (Israel contactó recientemente con el ejecutivo que dirige José Luis Rodríguez Zapatero para intentar que España no respalde la propuesta que planteará Madmud Abás), lo más probable es que se decante por defender la causa árabe. Así lo dejó entrever la ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez, en una entrevista publicada en el diario El País hace menos de un mes.

Un soldado de Israel en una calle de Jerusalén.
Foto: Pelu Vidal

No triunfará, pero el debate sobre la soberanía está servido y superará –aunque sólo sea por algún tiempo– los escenarios en los que se trata habitualmente. El conflicto palestino-israelí es mediático, pero lo será más todavía tras la solicitud y la comparecencia del presidente de la ANP en la ONU.

Es probable que Mohammed siga encestando en Hebrón durante muchos años, a falta de más oportunidades. Pero algún día, quizás más pronto que tarde, la realidad cambiará y los dos pueblos vivirán en paz y respetarán sus fronteras. Para los palestinos todo será mucho más sencillo a partir de ese momento. Y también para los israelíes, por supuesto. La comunidad internacional tiene el deber de ayudar a unos y a otros. No en vano, el lema de las Naciones Unidas es “Nosotros los pueblos... unidos por un mundo mejor”.


Pincha aquí para más información.

sábado, 23 de julio de 2011

El mayor check point del mundo

El Festival Internacional de Clown de Galicia (Festiclown) y la Asociación cultural y de cooperación internacional Pallasos en Rebeldía son los dos organismos responsables del Festiclown Palestina, una iniciativa que pretende aportar oxígeno a los palestinos que sufren las secuelas físicas y psicológicas del interminable conflicto árabe-israelí.  El trabajo se puede seguir en la web de Pallasos en Rebeldía. En este blog hay más información disponible. 

Algunos periódicos recogieron esta semana un texto escrito por Iván Prado, un clown gallego implicado en este proyecto. Aborda las medidas de seguridad a las que la expedición del Festiclown Palestina tuvo que hacer frente en el aeropuerto de Ben Gurion (Tel-Aviv). 

Iván Prado en el Territorio Palestino.






CRONICA CERO: EL MAYOR CHEK POINT DEL MUNDO
Avión, madrugada, cafés y bocadillos que solo saben a risas nerviosas y abrazos cómplices, es el mismo viaje que hace dos años, que hace un año, que hoy….Prisas y miedos, horas de sueño robadas por la excitación y el trabajo,  emociones de la  despedida y sueños por cumplirse. Madrid-tel aviv-Jerusalem y entre medias el mayor chek point de la historia: Ben Gurion.
Un chek point disfrazado de aeropuerto:
Pasillos que se vuelven interminables, que amenazan con su luz de hospital y sus cámaras móviles, pasillos que para mi solo tienen un destino: la garita de interrogatorios de la policía de fronteras isarelí; el sin bet. Todo en este aeropuerto está calculado y previsto con la misma precisión enferma que el muro de la vergüenza, que ahoga Cisjordania en mitades q no se tocan. Agua que cae del cielo para recordar que Israel se ha apropiado de los pozos de esta parte casi desértica del mundo, militares disfrazados de paisano para esconder que son la 1º potencia mundial en inteligencia y espionaje, y metros y metros de pasillos para empequeñecerte con cada paso si sabes que no eres bienvenido a la tierra prometida. Una vez más sucede.  Un funcionario, yo le llamo el taxista,  decide llevarse mi pasaporte de paseo y a mi detrás como un perrito faldero hasta la ya familiar sala de espera en la que empieza un ir y venir de gente que, más que personas, son tratadas como virus: Israel no quiere ser contaminada por los derechos humanos ni el libre tránsito de la gente y su historia. Pero después de 16 meses y un estúpido interrogatorio consigo entrar en Palestina, parece que la celda y la deportación no son mi destino en este viaje, por lo menos de momento… Ben Gurion, como bien lo saben los solidarios internacionales (especialmente en estos días)y el pueblo palestino señaladamente, es un chek point que retiene, expulsa, encarcela e humilla a toda la humanidad, pero hoy como un cíclope dormido ha dejado que se le cuelen dos payasos rebeldes con la humilde llama de un festival lleno de dignidad y esperanza: EL FESTICLOWN PALESTINA EMPIEZA SU CUENTA ATRÁS, y mi sueño de volver al corazón de la humanidad se ha cumplido. Estoy de nuevo en casa… 

lunes, 20 de junio de 2011

Reverso: Palestina errante



L. Pérez/Pontevedra

Hoy he publicado en mi muro de facebook el dolor que me provoca que en el mundo haya más de 40 millones de refugiados, hombres y mujeres que tuvieron que huir de sus países por las guerras (¿qué es un conflicto armado sino una guerra?) o por la violación de sus derechos. Hoy facebook se me queda corto. Acostumbramos a hablar de grupos de personas como si no tuviesen alma; decimos “millones de muertos”, “millones de refugiados”, “miles y miles de parados” o “cientos de damnificados”. Tal vez ni siquiera podemos imaginarnos la tragedia de un refugiado, pero debemos tratar de pensarnos desde fuera, vernos caminando por una pista de tierra con la nada por delante y con nuestra vida detrás, obligados a partir de cero por intereses ajenos difíciles de comprender.

Según los cómputos de la Agencia de la ONU para el Socorro a los Refugiados Palestinos en Oriente Medio (UNRWA), los palestinos son una tercera parte del total de la población mundial que se ve forzada a buscar cobijo lejos de su casa. En los territorios ocupados, Líbano, Siria y Jordania, la cifra es de 4,8 millones, es decir, más del 43 por ciento del total de palestinos que vive en todo el mundo. ¿Cuántas almas son? Pues más o menos el número de parados que hay en nuestro país. De unos hablamos constantemente: son y deben ser nuestra preocupación; de los otros nos acordamos muy de vez en cuando, tal vez en días como hoy, coincidiendo con el Día Mundial del Refugiado.

Ashraf Khader, delante del Muro de la Vergüenza, en Ramallah.
Foto: Pelu Vidal
Conocí a Ashraf Khader, si no me equivoco, el 18 de octubre de 2010. Fue el guía que tuvimos los reporteros que Agareso envió a Oriente Medio en el marco de “Caminos de Paz. Las otras voces de Israel y Palestina”. Ashraf jugó un papel muy importante en nuestro proyecto, en este blog, en nuestros documentales. Desmenuzó en dos jornadas la reflexión más interesante: la historia de su vida y la de su familia, una familia de refugiados.

Sus allegados viven en Jordania y en Egipto. Sólo Ashraf y su padre tuvieron la oportunidad de regresar a los Territorios Palestinos. Decidió volver, pero lo hizo en soledad. Su padre prefirió no regresar y continúa en el exilio porque, alto y claro, eso es el exilio. Los parientes de Ashraf no viven en campos de refugiados, tienen vivienda propia en Jordania y Egipto, pero… “Para un refugiado, lo más complicado es la situación en la que vive. El segundo problema es que, en el país de destino, no tiene derechos”. Los palestinos que se marchan tienen enormes dificultades para conseguir un trabajo y mantener a sus familias, porque “no son tratados como ciudadanos de esos países”. Creo que Ashraf quiso decir que “no son tratados como ciudadanos”, son una suerte de apátridas.



“La mayoría de los países tratan de convencer a los refugiados de que se comporta así por el propio bien de Palestina. No quieren que se sientan como en casa porque dicen que olvidarán su país, así que no les dan derechos”, nos contó. Ashraf regresó a una patria extraña que no llega a ser patria y participó activamente en la II Intifada o Intifada de Al-Aqsa. Después decidió dejar atrás la violencia y pasó a formar parte de Combatants for Peace, un movimiento pacífico del que forman parte ex soldados israelíes y palestinos que lucharon en la II Intifada. Fue una decisión importante, tan potente que cambió su vida. Pero, ¿cómo explicarla a su familia, que se vio obligada a marcharse de los Territorios Palestinos por el desacuerdo entre árabes e israelíes? ¿Cómo decirles que trabaja con hebreos? Por su respuesta sabemos que no llegaron a entenderla: “Si viniesen aquí creerían en lo que hago. Pero no pueden volver”.
En Egipto, Jordania, Siria, en los territorios ocupados… En todo el mundo hay familias como la de Ashraf. Son más que números. Por más que nos lo cuenten, no podemos ni imaginarnos su dolor. Pero sí es nuestra obligación tratar de pensarnos desde fuera, vernos caminando por una pista de tierra con la nada por delante y con toda nuestra vida detrás.

domingo, 5 de junio de 2011

Reverso: medio año después

L. Pérez/Pontevedra

Formo parte del equipo de cuatro personas que se desplazo a los Territorios Palestinos en el marco del proyecto Camiños de Paz, una iniciativa que nos ha permitido y que nos permitirá dar a conocer un trabajo prácticamente desconocido. De Palestina e Israel recibimos en España, casi únicamente, noticias sobre la falta de entendimiento entre los políticos. Soy periodista y me duele decirlo, pero los medios de comunicación han dejado a un lado las historias humanas y el esfuerzo de ciudadanos anónimos que sí sueñan con la paz.
En Palestina e Israel escuché algunas de las historias más tristes que he oído en mi vida, no sólo como periodista. Pero también conocí esa labor oculta que implica a cientos de personas. Contactamos con organizaciones con prestigio internacional, como Cruz Roja, hasta grupos más pequeños de mujeres y de hombres que han hecho de la búsqueda de una solución al conflicto el eje de sus vidas. Muchos de ellos fueron testigos directos de los enfrentamientos y se sumaron a movimientos de paz. The Parents Circle, por ejemplo, es una ONG que agrupa a ciudadanos palestinos e israelíes que perdieron a sus familiares a manos del ejército israelí o en acciones protagonizadas por árabes suicidas. Rami Elhanan, por ejemplo, perdió a su hija de 14 años cuando un palestino hizo explotar una bomba. El hermano de Ali Abu Awwad fue asesinado por un soldado israelí. Ninguno de los dos tenía demasiadas ganas de vivir, pero encontraron en The Parents Circle un lugar de entendimiento.
En Jerusalén hay una radio que emite en dos idiomas para acercar a los dos pueblos, y una ONG integrada por mujeres que vigilan el trato que los soldados israelíes dan a los palestinos cuando cruzan los puntos de control; También el comité contra la destrucción de casas palestinas, que visibiliza la demolición de casas de los ciudadanos árabes por parte del gobierno judío. Y es un movimiento que está encabezado por judíos.
Llegará un momento en el que el Gobierno de Israel y la Autoridad Nacional Palestina tendrán que escuchar al tejido social. Esperemos que sea más pronto que tarde.

viernes, 3 de junio de 2011

Las distintas vertientes de la ocupación palestina a través del cine


Agareso

Las ONGD Asamblea de Cooperación por la Paz (ACPP) y Asociación Gallega de Reporteirows Solidarios (AGARESO) dan comienzo este lunes 6 de junio a un ciclo de cine sobre la ocupación palestina en el Salón de Grados de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la USC con la proyección del documental 'Al otro lado' y la terminan el viernes 10 con una charla del activista palestino Sami Dawood en casa das Campás de Pontevedra.
Este ciclo de cine se enmarca en la campaña de sensibilización 'Caminos de Paz: Las Outras Voces de Israel y Palestina', que tiene como objetivo acercar a la ciudadanía gallega, desde la perspectiva de los derechos humanos y del cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), la situación en Oriente Próximo y el trabajo realizado por ACPP, AGARESO y la sociedad civil Palestino-israelí con el fin de lograr una solución pacífica del conflicto de esta zona.
Durante los días 6, 7 y 8 se proyectarán diferentes documentales que muestran las condiciones en las que viven los pueblos palestino e israelí tras la situación de conflicto, la violación de derechos humanos, el papel de las organizaciones paficistas, de la sociedad civil y de la comunidad internacional. Todas las proyecciones serán a las 19.00 horas en Ciencias Políticas e irán seguidas de un debate acerca de la realidad mostrada por cada film.
Para complementar esta actividad, los días 9 y 10 está organizada una charla de Sami Dawood, director técnico de Palestinian Hidrology Group (PHG), ONG Palestina que trabaja para mejorar el acceso a los servicios de agua y saneamiento, y para controlar contaminación y el cambio climático en el territorio palestino ocupado.

Los documentales que forman parte de este ciclo son:
Lunes 6 de junio: "Al otro lado" (Julio Azcárate), con una duración de 58 minutos. Recoge como en el mes de septiembre de 2005 un grupo de juristas realiza un viaje la Palestina con el objetivo de comprobar sobre el terreno las consecuencias que había tenido la Opinión Consultiva de la Corte Internacional de justicia de 9 de julio de 2004 por la que declaraba contrario al derecho Internacional el Muro que el Estado de Israel está construyendo en el territorio palestino ocupado. En concreto, se trataba de observar el estado actual de la construcción del Muro, la politica israelí respecto de eso y la situación real de la población palestina afectada.

Martes 7 de junio: Dos proyecciones:
"Palestina: El agua ocupada" (Asamblea de Cooperación por la Paz). Un documental de 21 minutos acerca del Theatre for Everybody, un grupo de teatro palestino que, con su obra "Maye, maye" (Agua, agua), trata de sensibilizar a la población de Gaza acerca de la importancia de un buen uso y ahorro del agua. Pero esta importancia no se debe únicamente a la escasez o al cambio climático. Gaza está bajo asedio y la vida, a veces, se convierte en supervivencia.
"Resisting the occupation" (ICAHD: Comité Israelí contra la Demolición de Casas). Un documental de 24 minutos sobre la tarea de la organización ICAHD, realizado por los mismos, que muestra su resistencia pacifica a las demoliciones de casas palestinas en los territorios ocupados.

Miércoles 8 de junio: "Promises" (Justine Shapiro y B. Goldberg). Película de 106 minutos en la que a partir de los testimonios de siete niños (de 9 a 13 años), conoceremos lo complicado que es crecer en Jerusalén. Aunque los niños viven a sólo veinte minutos de distancia entre sí, habitan en mundos radicalmente diferentes, prácticamente incomunicados, y son conscientes de la situación. Su visión de las cosas está modelada por las imposiciones de los adultos que les rodean. Pero este grupo decidió saltar las barreras para encontrarse con sus vecinos.

sábado, 21 de mayo de 2011

'Rumbo a Gaza' ayudará a la Franja desafiando la presión internacional

Barco que integrará la II Flotilla de la Libertad. Foto: Rumbo a Gaza


Agareso

Todas las personas que componen Rumbo a Gaza manifiestan su inquebrantable voluntad de zarpar en la tercera semana de junio en la Segunda Flotilla de la Libertad, que partirá con el objetivo de romper y poner fin al bloqueo de la Franja de Gaza. La Campaña Rumbo a Gaza aportará un barco, un nutrido grupo de activistas y un cargamento de ayuda humanitaria a la coalición internacional que compone la Segunda Flotilla de la Libertad.

Desde Rumbo a Gaza responden con una declaración pública a las "inadmisibles presiones que el Gobierno de Israel, con su primer ministro, Benjamín Netanyahu a la cabeza, está realizando sobre el Gobierno de España para impedir la salida de nuestro barco y nuestros activistas".

"También pedimos al presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, que no ceda a las maniobras intimidatorios israelíes y manifestamos nuestra más absoluta disponibilidad a reunirnos con él para explicarle los detalles de la Campaña Rumbo a Gaza y de la Segunda Flotilla de la Libertad", indican.

La Campaña Rumbo a Gaza es una iniciativa no violenta amparada por las legislaciones española e internacional. Por tanto, el Gobierno español está obligado a garantizar tanto su seguridad como su libertad y derecho de llegar hasta la Franja de Gaza.

Desde la Campaña Rumbo a Gaza se entiende que los objetivos de la Flotilla son plenamente coincidentes con la postura oficial del Gobierno de España respecto a la defensa de la legalidad internacional y los Derechos Humanos y de condena del bloqueo de la Franja de Gaza por su carácter ilegal de acuerdo al Derecho Internacional. Esta coincidencia en cuanto a los objetivos hace aún más lógica la idoneidad de un apoyo gubernamental a la Campaña.


Finalmente, recuerdan que la Campaña Rumbo a Gaza ya expuso estos requerimientos de apoyo, seguridad y protección al Gobierno español en la reunión mantenida en marzo con el director general de Política Exterior para el Mediterráneo, Magreb y Oriente Próximo, Juan González-Barba Pera.


En este encuentro, se acordó establecer un canal de comunicación directo entre el Ministerio de Asuntos Exteriores y Rumbo a Gaza para analizar y dar respuesta a las eventualidades que puedan surgir en torno a la  Flotilla. "Desde Rumbo a Gaza expresamos nuestra más absoluta disponibilidad para utilizar este canal cuantas veces sea necesario", indican.

Campaña Rumbo a Gaza
La Campaña Rumbo a Gaza surge de la sociedad civil del Estado español con el objetivo de aportar un barco, un nutrido grupo de activistas y un cargamento de ayuda humanitaria a la Segunda Flotilla de la Libertad, además de sensibilizar a la opinión pública sobre la dramática situación de la Franja de Gaza y, por extensión, del pueblo palestino.

La Campaña Rumbo a Gaza se define como una iniciativa no violenta amparada por las legislaciones española e internacional, no adscrita a ningún partido político español, europeo, palestino o internacional y cuyo fin último es coadyuvar a la búsqueda de una solución al sometimiento del pueblo palestino que sea justa y acorde con los Derechos Humanos.

Tras casi un año de intenso trabajo, Rumbo a Gaza ha logrado la meta inicial de aportar un barco, activistas y ayuda humanitaria a la Segunda Flotilla de la Libertad. Este logro demuestra el gran respaldo que la sociedad civil española ha dado a la campaña y equipara Rumbo a Gaza con otros grandes movimientos de solidaridad internacionalista que han tenido lugar en las últimas décadas como la Plataforma del 0,7 o el movimiento No a la Guerra.

jueves, 24 de marzo de 2011

Latinoamérica se suma a los apoyos por una salida dialogada del conflicto

Jerusalén es punto de encuentro de varias religiones. Foto: L.P.

Agareso


“La paz en el Oriente Medio debe basarse en poner fin a la ocupación de los territorios palestinos que comenzó en 1967 y la creación de un Estado Palestino independiente y soberano sobre los territorios, con Jerusalén oriental como su capital, a vivir junto a Israel en paz y seguridad”. Esta afirmación que bien podría resumir el trabajo de las organizaciones israelís y palestinas que trabajan para encontrar una solución dialogada a la situación que viven desde hace cerca de medio siglo es ya una declaración oficial que suscribe la sociedad civil organizada alejada del epicentro del conflicto.

Es la principal conclusión de la Declaración de San José, suscrita este mes de marzo en Costa Rica como fruto de los debates generados en el marco del ‘Foro Internacional Alianza Latinoamericana por la paz en el Medio Oriente’. Y es también algo más. Según el propio documento, “esto debe ser la pieza central de una paz árabe-israelí más amplia e integral que permita el reconocimiento de Israel por todo el mundo árabe”.

El documento suscrito supone el primer apoyo oficial y masivo que recibe esta lucha por una solución dialogada del conflicto palestino-israelí y tiene una validez moral que le otorga haber sido firmado en un foro de debate en el que participaron personalidades del mundo académico o político como el observador permanente del pueblo Palestino en las Naciones Unidas, Riyad Mansour; el escritor y especialista en temas árabes Hussein Ibish; el ex ministro para los Refugiados Palestinos y ex miembro del Comité Ejecutivo de la OLP, Asaad Abdel Rahman; o la diplomática y ex parlamentaria israelí Colette Avital.

La Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode), la Fundación Arias por la Paz y el Progreso Humano y la Facultad Latinoamericana de la Ciencias Sociales (Flacso) son algunos de los apoyos con pasaporte no árabe de la Declaración de San José, que insta a America Latina “a participar más directamente en la paz en Oriente Medio y ampliar el número de actores internacionales en un acuerdo de paz de dos Estados”.
 
Representantes de países europeos o centroamericanos y la propia comunidad árabe y judía son completan el respaldo de este documento, que aspira a conseguir avances como el respaldo de países como Costa Rica, Ecuador, Chile, Bolivia, Uruguay, Argentina, República Dominicana o Brasil en el reconocimiento diplomático del Estado palestino.

Esta declaración de once puntos recoge también el compromiso de la sociedad civil latinoamericana por abogar por el diálogo como vía de salida de la situación que vive la región y ratificar este apoyo acompañando en la medida de sus posibilidades las conversaciones por la paz.

Como respaldo a este proceso de diálogo, el documento señala que la Iniciativa Árabe de Paz adoptada por la Liga Árabe en el 2002 es una base fundamental para llegar a la paz y no olvida que “la paz debe basarse en la legitimidad internacional, y debe reflejar la gran cantidad de leyes internacionales y resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el estatuto final”.

miércoles, 23 de marzo de 2011

La ONU repudia los ataques en Jerusalén Oriental y Gaza

Agareso


Foto: ONU
El Secretario General de la ONU condenó enérgicamente el ataque con bomba perpetrado el miércoles 23 de marzo de 2011 en una parada de autobús en Jerusalén Oriental, que causó la muerte de una mujer y dejó más de 30 civiles israelíes heridos, algunos de ellos de gravedad, así como el ataque de Israel en la Franja de Gaza producido el día anterior, en el que murieron tres niños palestinos y uno de sus familiares, además de dejar a trece civiles heridos.

Ban Ki-moon reiteró que este tipo de acciones son inaceptables y expresó profunda preocupación por la violencia contra la población civil en esa región del mundo. Además, urgió a un cese inmediato de los ataques y actos de terrorismo para evitar una mayor escalada de violencia y más muertes de civiles inocentes.

La explosión tuvo lugar a una hora pico en uno de los principales accesos a Jerusalén, por donde pasan diariamente miles de personas, y fue producido por un artefacto colocado junto a un autobús.


Escalada de violencia en la Franja

Ban Ki-moon. Foto: ONU
Ban dijo estar muy preocupado por la escalada de la violencia en la Franja de Gaza y el sur de Israel. Asimismo, reiteró su repudio al uso de misiles por parte de milicias palestinas en Gaza contra objetivos civiles en Israel.

El titular de la ONU pidió a todas las partes que respeten sus obligaciones bajo las leyes humanitarias internacionales y los derechos humanos.


sábado, 19 de febrero de 2011

La infancia en Palestina


A principios de mes, Save the Children dio a conocer un informe demoledor sobre la situación de los niños que viven en los territorios ocupados de Palestina. La historia de Mohammad -protagonista del pequeño vídeo de Save the Children- es la historia de miles de niños, las víctimas más crueles del conflicto.




 

Save The Children
04/02/2011. Miles de niños y niñas palestinos de la Franja de Gaza y Cisjordania se ven forzados a vivir sin un acceso adecuado a servicios básicos como la atención sanitaria, la educación y el agua. 

Pero no es sólo esto lo que hace tan difícil la situación de la infancia en este lugar: un estudio que realizábamos el año pasado mostraba que entre octubre de 2000 y abril de 2009 más de 6.700 niños fueron detenidos a manos de las fuerzas israelíes. El estudio demostraba además que Israel rutinariamente procesa a los niños palestinos, muchas veces con tan solo 12 años, describiendo los malos tratos y la tortura a los niños palestinos como "generalizada, sistemática e institucionalizada".

Para tratar de ayudar a estos jóvenes a superar el trauma ocasionado por la detención, desde hace un tiempo llevamos a cabo un programa en la zona de Cisjordania por el que, entre otras cosas, los participantes expresan sus sentimientos a través del dibujo y la creación. En el video, Mohammad nos habla de sus experiencia.




Durante el año pasado, 26 niños palestinos murieron "trabajanado" en las cercanía de la frontera con Israel


En los territorios ocupados, sobran los aspectos de la realidad de la infancia en los que podemos centrarnos para describir la difícil situación por la que pasan día a día.

La realidad hace que algunos de los niños de la Franja de Gaza se enfrenten a diario a los disparos de los soldados israelíes mientras se acercan a la frontera para buscar materiales de construcción que aprovechan de las ruinas que dejaron los derribos de casas y barrios enteros resultado de la última gran ofensiva de Israel en enero del 2009.

Según un estudio del grupo de trabajo sobre Menores Afectados por Conflictos Armados, durante el pasado año 26 niños resultaron muertos como consecuencia de los disparos de las tropas israelíes en las inmediaciones de la frontera con Israel.

El pasado mes de septiembre, un niño de 16 años y su abuelo de 91 moría por el ataque de un tanque israelí a 700 metros de la frontera, resaltando la fuerza mortal empleada frente a los niños y niñas que trabajan fuera de la denominada "zona tampón". Esta zona, impuesta por Israel se extiende, en la práctica, en más de un kilómetro tierra adentro en la franja de Gaza y cubre una superficie total de 50 km2 aproximadamente, donde se encuentra casi un tercio de la tierra agrícola de Gaza, así como tierras para buena parte de su ganado.




El impacto real de la demolición de las casas


En los territorios ocupados, cada día se derriba una media de tres casas y, en algunos casos, las autoridades israelíes han dado órdenes de demolición que han derrumbado pueblos enteros. Estas demoliciones dejan a más de 300.000 palestinos bajo la amenaza constante de perder sus hogares. 

La tasa de demoliciones ha aumentado significativamente desde la Segunda Intifada, que daba comienzo en el año 2000 y, según muestra el estudio, estas demoliciones han pasado a convertirse en la causa principal de desplazamiento forzado en el Territorio Ocupado. 

Cuando se destruye una casa, la familia pierde su hogar y todo el apoyo financiero que supone lo poco o mucho que le pertenece. Pero el impacto real va mucho más allá de la propiedad física y económica. En el informe "Hogares Rotos", elaborado por Save the Children junto con distintas asociaciones palestinas, se señala que las familias cuyas casas son derribadas son advertidas con muy poco tiempo y, a menudo, no pueden recoger ninguna de sus pertenencias. Desde que comenzaran las demoliciones de casas en 1967, se estima que los civiles y las autoridades militares israelíes han destruido cerca de 24.000 casas. Sin embargo, desde el año 2000 el número de casas que están siendo derribadas ha aumentado con una media de más de 1.000 hogares destruidos al año.

Este año ha visto un incremento masivo, con más casas que están siendo destruidas que en ninguna otra ocasión desde que comenzara la ocupación israelí hace 40 años, según este informe. Al menos 4.000 casas se han destruido como resultado de la ofensiva militar en Gaza, a principios de este año. 

"Las demoliciones en los territorios palestinos han aumentado, y miles de familias y, en algunos casos, aldeas enteras, permanecen bajo la amenaza de los bulldozer que llegan para destruir sus casas, por lo que hay desplazados cada día", señaló el director para los territorios palestinos de Save the Children, Salam Kanaan.

"La mayoría de derribos se realizan por las denominadas razones denominadas "administrativas" o como resultado de operaciones militares", indicó. "Las familias lo pierden todo cuando sus casas son derribadas", aseguró. "La ropa, los alimentos y los muebles son enterrados entre los escombros, y hay poca ayuda para estas familias que se marchan sin nada, sin apoyo, sin protección", lamentó Kanaan.

El impacto de perder su casa también tiene consecuencias a largo plazo para la salud física y mental. Los investigadores entrevistaron a las familias cuyas casas fueron demolidas y encontraron que el 97% de los padres están en riesgo de colapso mental o psicológico como resultado de la destrucción de sus hogares, que apenas el 13% de las familias tienen oportunidad de recoger sus pertenencias antes de que comience la destrucción y que los niños cuyas casas han sido derribadas muestran un declive en su salud mental, sufriendo los síntomas clásicos de trauma, depresión y ansiedad.

Además, la mayoría de familias que se quedaron sin casa se convirtieron en desplazados y a más de la mitad de ellas, un 61%, les llevó al menos dos años encontrar un lugar permanente para vivir.

El informe también apunta que los que más riesgo corren de sufrir desplazamientos por la creación de asentamientos o por la demolición de hogares serían los habitantes de Jerusalén Este, las comunidades rurales de Cisjordania, los beduinos y los refugiados que viven en campamentos, además de los residentes que viven cerca de las fronteras de Gaza.

jueves, 20 de enero de 2011

La bandera palestina en Washington

Reproducimos una noticia de interés para los seguidores de este blog. La información es de El País y se refiere a la instalación de una bandera en la sede de la OLP (Organización para la Liberación Palestina). Puede parecer un paso pequeño, pero poco a poco se hace el camino.

La bandera palestina ondea por primera vez en Estados Unidos

El País

Ha sido izada en la sede de la OLP de Washington
El Departamento de Estado especifica que el acto no supone un cambio de rumbo en su estrategia para Oriente Próximo

La bandera, instalada en la sede de la OLP. France press.

La bandera palestina ha sido izada este martes por primera vez en el exterior de la delegación de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Washington, como símbolo de la lucha de los palestinos por crear un Estado independiente. Maen Rashid Areikat, el enviado de la OLP para EEUU, izó la bandera de tres bandas horizontales de color negro, blanco y verde y un triángulo rojo desde un balcón de la delegación. Ondea así encima de la entrada principal del edificio de la misión.

El portavoz del Departamento de Estado, Philip Crowley, ha querido dejar claro que esto no significa un cambio de rumbo en la política estadounidense. Así, ha explicado que el Gobierno accedió "hace meses" a que la OLP izara la bandera palestina y ha puntualizado que eso no implica que haya cambiado el estatus de la misión en EEUU. "El dar permiso para izar la bandera no cambia su estatus básico", ha indicado.

En la ceremonia, Areikat ha calificado el momento de "histórico". "Es hora de que esta bandera, que simboliza la lucha de los palestinos por la autodeterminación y la creación de un estado, sea izada en EEUU", ha afirmado. Para Areikat, el gesto de EEUU "indica la voluntad" de la Administración del presidente Barack Obama de afrontar "las realidades". "Les interesa a la comunidad internacional, a EEUU y a todo Oriente Medio el que se crea un Estado palestino", ha agregado.

Areikat argumentó ante el Departamento de Estado que no tenía ningún sentido que se izara la bandera palestina en la base aérea estadounidense de Andrews cada vez que llegaba el presidente palestino, Mahmud Abás, y que se le reciba con la guardia de honor y no lucirla en el exterior del edificio de la delegación de la OLP.

A juicio de Areikat, el permiso de Washington también demuestra que el Gobierno de Obama se toma en serio su afirmación de que "quiere ver que la lucha de los palestinos acabe en la creación de un Estado palestino". "Lo que les urgimos ahora (al Gobierno de EEUU) es que traduzcan este apoyo al Estado palestino a la acción concreta", ha apuntado.

Los representantes palestinos trabajan para que los miembros de la ONU reconozcan la existencia de un Estado palestino y negocia con miembros del Consejo de Seguridad un proyecto de resolución que condene los asentamentos judíos en territorio palestino.

domingo, 28 de noviembre de 2010

Árabes e israelíes que sueñan con la paz (I)

L. Pérez-Pontevedra
Reportaje publicado el domingo, 28 de noviembre, en Diario de Pontevedra
El 29 de noviembre de 1947, la Asamblea General de la ONU acordó dividir Palestina en dos estados. Equivocada para muchos y adecuada para otros, la decisión provocó un conflicto que demasiado a menudo estalla y salta a las portadas de los periódicos y a los telediarios. Mañana se celebra el Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino. Importantes mandatarios del mundo trabajan en busca de salidas al enfrentamiento; aunque apenas se cuenten sus historias, muchos ciudadanos israelíes y árabes también luchan por la paz.


Hashem Yamani sentado en su sofá, delante de su sexta casa. Las anteriores fueron derruidas por Israel.
Foto: Pelu Vidal

El sofá de Hashem Yamani no está en su casa. Un velo de provisionalidad cubre su actual y sexta vivienda, que sustituyó a la quinta, que había reemplazado a la cuarta, que había hecho lo mismo con la tercera…  Es una de las miles de víctimas de la política de demoliciones que practica el Gobierno de Israel. Sentado en su sofá, al aire libre, encomienda su suerte a un olivo plantado al lado de una piedra en la que alguien talló versos del Corán. Confía poco en el futuro y tiene en la mente bulldozers que destrozan fachadas. Hay muchos casos como el suyo, injusticias por las que mañana, al igual que cada 29 de noviembre, se celebra el Día Internacional de la Solidaridad con el Pueblo Palestino. Pero, ¿quién defiende a Hashem Yamani sobre el terreno?
Somos cuatro los periodistas de Agareso (Asociación Galega de Reporteros Solidarios) que nos movemos por los Territorios Palestinos. En ocasiones, el equipo se divide en parejas. Todo cambia en Nabi Saleh, un pueblo que cada viernes se llena de humo, de coches de bomberos y de ambulancias. Nos vemos obligados a dividirnos, a correr por separado, a escondernos. Hay que escapar de las bombas de gas lacrimógeno que los soldados israelíes emplean para disuadir una manifestación contra una colonia judía. La población protesta contra el muro de la vergüenza y la “asfixia” a la que se ve sometida. El ejército responde con contundencia: toma algunas casas, provoca pequeños incendios en otras, amenaza al fotógrafo de Agareso y consigue que algunos lloremos por los gases lacrimógenos. Acusamos también la tristeza que provoca la incomprensión entre los pueblos. ¿A alguien le importa Nabi Saleh?
Ramallah, Jerusalén, Hebrón, Gaza… Los Territorios Palestinos esperan; en algunos  lugares, el peso del pasado tensa la calma. Sucede en Jenín, símbolo de la Intifada. En una esquina hay una furgoneta quemada. Mohammad Nasser Alaeay la conducía en 2002, cuando fue objeto de un ataque del ejército israelí. En su interior no había armas… Era más que una furgoneta: se trataba de una ambulancia de la Media Luna Roja. El conductor relata lo ocurrido. Al principio de nuestra conversación está ubicado debajo de la fotografía de un hombre de mediana edad. Era el médico que viajaba en la ambulancia, que nunca llegó a su destino porque se cruzó con un tanque. Los militares obviaron la legislación internacional. Dispararon y mataron a cuatro personas: el doctor y otros tres miembros de la Media Luna. En la mano de Mohammad, dos dedos menos; en la piel, quemaduras graves; en la mente, el horror de la Intifada de Al Aqsa vivida en primera persona. “Sabían que era ayuda humanitaria. Lo sabían”, manifiesta. ¿Quién se acuerda de la Convención de Ginebra?
Una mujer cruza un punto de control de Israel.
Foto: Pelu Vidal

Los Territorios Palestinos son una sucesión de puntos de control (checkpoints) de Israel. Fijos y móviles, impresionan a quien no está acostumbrado a vivir entre metralletas. Con el muro, conocido por buena parte de la comunidad internacional como “El muro de la vergüenza”, forman un tándem cuya presencia tensiona la musculatura. Los bloques de cemento, las alambradas de espino y las torretas de vigilancia se extienden durante cientos de kilómetros. ¿Hasta qué punto se conocen los checkpoints?
Alguien habla en una oficina del centro de Jerusalén mientras Hashem Yamani observa los escombros de sus antiguas viviendas desde su sofá. Es Jeff Halper, corresponsable del Comité Israelí Contra las Demoliciones de Casas, una organización que se opone pacíficamente a los derribos de viviendas palestinas. Halper (postulado para el Premio Nobel de la Paz en 2006) es tremendamente crítico con el Gobierno de Israel, con el gobierno de su propio país, que desde 1967 ha demolido unos 24.000 hogares. ¿Por qué sigue adelante? Porque cree en una solución de consenso. Y cada persona que sube al autobús del Comité Israelí Contra las Demoliciones de Casas  que circula por Jerusalén y que no tiene nada de turístico, aprende algo que no sabía sobre condiciones de vida de los árabes en Jerusalén. Y esa persona se convierte en un altavoz. Y así, de boca en boca, se prepara el terreno para la paz. Jeff Halper sí defiende a Hashem Yamani.  

lunes, 8 de noviembre de 2010

Reverso: ¿Hacia una tercera Intifada?

Vecinos de Nabi Saleh en una protesta pacífica que acabó con lanzamiento de bombas
de gas por parte del Ejército israelí. Octubre 2010. Foto: Pelu Vidal


Mar Mato


Hace cinco años que ni Israel ni Palestina viven una Intifada. Sin embargo, muchas voces consultadas por Agareso consideran que no falta mucho para una tercera edición.

Palestinos civiles en la calle lo aseguran: "Es inevitable y está muy cerca", señala un árabe que habita en Jerusalén y cuya identidad guardamos en el anonimato. Otro ciudadano de los territorios ocupados coincide: "Si las cosas no cambian, no hay otro camino".

En el lado israelí, dentro incluso de las organizaciones que trabajan con ACPP segundo a segundo para lograr el diálogo con los palestinos y construir un camino hacia la paz desde acciones no violentas, también creen que la Tercera Intifada está a punto de nacer.

La percepción de que vaya a acontecer no se siente al pasear por calles de Jerusalén, Jenin, Ramallah, Gaza, Hebrón o Belén. Al contrario, tranquilidad, es lo que percibe en ellas, incluso alegría de vivir; pero se trata de una tranquilidad aparente.

En los días finales de octubre, Palestina no olvidaba que hace una década daba comienzo la Segunda Intifada en la que fallecieron unas 6.700 personas, de las cuales, el 82 por ciento eran palestinos. Tampoco podían borrar de su mente cómo había comenzado la Primera Intifada, como una demostración de descontento popular. Las asociaciones pacifistas como las pertenecientes a la Coalición de Madrid de ACPP saben que el reloj corre en su contra. En la agenda de los políticos, la palabra paz aún no se ha escrito con mayúsculas.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Reverso: Los miedos de Israel


Los cuatro integrantes de la expedición de Agareso. De izquierda a derecha: Mar Mato (redactora); Hugo Fernández (operador de cámara); Luisa Pérez (redactora); y Pelu Vidal (fotógrafo).


 L. Pérez

El equipo de Agareso envió a Israel y a los Territorios Palestinos ya está en Galicia. Nuestro regreso no ha sido fácil. Los últimos tres integrantes de la expedición que permanecíamos en terreno partimos del aeropuerto de Ben Gurion (Tel-Aviv) el domingo. Sabíamos que tendríamos que responder a varias preguntas antes de coger el vuelo. Pero no nos imaginamos que la seguridad de Israel tendría tanto interés en revisar nuestro material y en conocer detalles de nuestras vidas que en absoluto le conciernen.

Israel convierte el famoso “¿tiene usted intención de matar al presidente de Estados Unidos?”  en una broma infantil. Nos asusta la frialdad con la que nos tratan . Respondemos a una primera tanda de preguntas. Después nos separan para ver si nuestras versiones sobre el objetivo de nuestro viaje coinciden:

-          ¿En qué ciudad te alojaste?
-          ¿Qué lugares visitaste?
-          ¿Cuál es el fin de vuestro viaje?
-          ¿De qué conoces a tus dos compañeros? ¿Qué relación tienes con ellos?

Ninguna de estas cuestiones nos sorprende. Sí las siguientes:

-          ¿Con quién vives en España?
-          ¿A qué te dedicas?
-          ¿De qué vives?
-          ¿Cuándo fue la última vez que tuviste un trabajo fijo?
-          ¿Llegaste a Israel con las preguntas ya preparadas para las entrevistas?
-          Detállame día por día lo que hiciste. ¿No tienes un calendario de trabajo?
-          ¿Con quién hablaste en Gaza?
-          ¿Puedes enseñarme las notas que tomaste en Gaza?

Tras la tanda de preguntas, nos conducen a una sala en la que prosiguen el interrogatorio. Nos informan de que Hugo Fernández tendrá que facturar su cámara y de que Pelu Vidal y yo tendremos que hacer lo mismo con nuestros ordenadores.

-          Nuestro material es importante.
-          ¿Y?
-          Que nuestro material es importante.

Les da absolutamente igual. Son siete, ni más ni menos, las personas que se están encargando de revisar todo nuestro material. Nunca pensé que se le podrían dar tantas vueltas a una mochila. También nos cachean; no se quedan solo ahí: me obligan a bajarme los pantalones. Rompen mi intimidad sin suficientes razones para hacerlo. Cuando regreso con mis compañeros veo un trasiego constante de integrantes del cuerpo de seguridad israelí. Se desplazan con nuestros odenadores y nos mandan encenderlos: “I want to know it your computer works”. Me hacen encender el skype en un ejercicio de control que me desespera, también para “I want to know it your computer works”.

Empiezan a circular con cajas blancas para que metamos en ellas los portátiles. Separan las baterías de Hugo de la cámara para que pasen por un control especial. Llevamos más de dos horas aquí dentro y empezamos a preocuparnos por el horario de salida de nuestro vuelo. Ni siquiera hemos podido dirigirnos a los mostradores para coger las tarjetas de embarque.

Los efectivos de seguridad israelí acaban con su pantomima. Hugo y Pelu han conseguido sacar de Israel el disco duro que contiene los vídeos y las imágenes. Estamos agotados y enfadados. Un joven nos conduce con rapidez al avión; una empleada de las líneas aéreas nos informa de que llegamos tarde al embarque mientras pesa nuestras maletas y las cajas con nuestros ordenadores.

Varias horas después llegamos a Vigo. A Pelu le faltan su ordenador y su mochila y a Hugo su ordenador.  Su cámara de vídeo está rota. A mí me falta el cargador del portátil, pero pasa un día entero hasta que me doy cuenta.

Israel dice que tiene miedo al terrorismo, pero también tiene miedo de las palabras y de las imágenes. Qué triste.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Baloncesto en el campo de refugiados

El club de baloncesto para gente con discapacidad de Jenin, en un entrenamiento junto
al campo de refugiados de la ciudad. Foto: Pelu Vidal


Texto: Mar Mato

En la ciudad palestina de Jenin, hay un campo de refugiados con 14.000 personas que nació en los años 50. En uno de sus espacios, sobre una cancha de baloncesto, Mohammad Abed -un palestino de 25 años de edad con paraplejia- entrena dos días a la semana con otros jóvenes de la zona. Su meta es crear un equipo fuerte para competir a nivel nacional e internacional.

"Este -explica Hisham Arabkabeya, coordinador de las actividades del club- es un club para personas con discapacidad. Lleva funcionando desde hace dos años de forma irregular pero ahora vamos a organizarlo mejor dando servicios y material a los deportistas con un entrenamiento regular. Queremos que entren en competición".

Para Mohammad Abed, el baloncesto es su deporte favorito aunque en la carrera en silla de ruedas haya ganado diversos trofeos. El entrenador tiene buenas expectativas: "Tiene potencial para ser un jugador destacado en el equipo en el futuro con posibilidad de participar en la liga nacional e internacional".

Ante la pregunta de si Mohammad se siente libre en el baloncesto, él asegura que sí. Tanto él como el resto de sus compañeros parecen felices ante la canasta. Años atrás, el pasado no pintaba tan alegre, con bombas, intrusión de militares en la ciudad. Era la Segunda Intifada. Por culpa de la represión militar a modo de balas y cañonazos, el número de gente con discapacidad se disparó en la ciudad. La mayor parte de los jugadores del club presentan ahora una discapacidad como consecuencia del conflicto. La Media Luna Roja, con el apoyo de ACPP, busca dar atención y servicio a esta población.

sábado, 30 de octubre de 2010

El conflicto en las carreteras

Un grupo de soldados pasea por una playa del Mar Muerto.
Foto: Pelu Vidal
L. Pérez/Ramallah

Llegar a la playa del Mar Muerto desde Jerusalén es relativamente fácil. El regreso es mucho más complicado porque en Israel apenas hay carteles que indiquen cuál es la dirección que debe tomar un viajero para dirigirse a una ciudad de los Territorios Palestinos. El equipo de Agareso ha recorrido cientos de kilómetros a bordo de un coche de alquiler sin sufrir ningún sobresalto hasta el momento.


La matrícula del coche no es blanca­. Aquí hay que optar por un color: una placa amarilla nos permite movernos por Israel y por los Territorios Palestinos. Nuestra capacidad de movimiento se vería muy mermada con una verde, porque únicamente podríamos desplazarnos por las ciudades árabes y su entorno. Tenemos suerte de poder elegir: los palestinos no tienen esa oportunidad. Además, un israelí y un palestino que alquilen el coche en el mismo día y por el mismo periodo de tiempo no pagan lo mismo. Los impuestos son menores para los primeros que para los segundos.

Dos personas cruzan un punto de control para peatones.
Foto: Pelu Vidal
Los obstáculos para desplazarse por carretera son constantes. En ciudades como Jerusalén hay taxistas nos preguntan cuál es nuestro destino antes de que subamos al coche. Algunos rechazan cubrir el servicio; en esta tierra hay mucho miedo, y no es irracional. Por esta razón, dos miembros de este equipo tuvieron que apearse de un taxi antes de llegar a su destino hace unos días. Se vieron obligados a cruzar un checkpoint a pie. Ocurrió en un acceso a Ramallah, a unos cuantos metros del muro construido por Israel sobre el que un artista dibujó los rostros de Yasser Arafat y de Marwan Barghouti.
¿Cómo funcionan los checkpoints? Los que controlan la circulación de vehículos se parecen a los peajes de las autopistas. Cuentan con barreras y con cabinas. El equipo de Agareso no ha tenido que dar explicaciones en ninguno, porque los soldados israelíes, que nunca se separan de sus metralletas, no lo han requerido. Por la noche conviene atravesarlos con las luces de fuera apagadas y con la de dentro encendida para que los militares vean las caras de los viajeros. Si deciden hacer bajar a los ocupantes de dos o tres coches aseguran un colapso monumental. Lo peor, en todo caso, no es el atasco. Lo peor de todo esto es la sinrazón.